El rugby es para disfrutar

Con nuestras competiciones acabadas, estamos en condiciones de ver partidos en el Hemisferio Sur con el SupeRugby , que compiten equipos de N/Z, S/A., Aust., Argentina y Japón. La Rugby Champioship, que juegan N/Z, S/A., Aust. y Argentina, con sus selecciones seniors masculinas oficiales y que se celebra desde el próximo 20/8 hasta el 8/10/16, ambas organizadas por la SANZAAR y auspiciadas y apoyadas económicamente por Mr. Rupert Murdoch, conocido magnate de la prensa, entre otras áreas económicas y de presión (perdón) difusión. En la primera edición, cuando se denominaba Tri Nations, la jugaban N/Z, S/A y Aust., fue "inyectada" con 600 millones de dólares USA a cambio de los derechos de imagen (Sky Sports ...) y la organizó la Sanzar (con una sola "A"), que hizo temblar a la poderosa (hasta entonces), I.R.B., haciéndole perder la hegemonía mundial del rugby, aunque ya para entonces funcionaba (y muy bien), la Super Twelve, antecesora del SupeRugby. Hablamos, por ejemplo, de Julio del 96. Total, 20 años de nada. Se adoptaron nuevas normas, puntuación bonus, franquicias, sedes, subsedes y unos principios éticos que el profesionalismo no ha sido capaz de arrastrar en ese Hemisferio. Porque en el Hemisferio Norte no es un tornado lo que está pasando, sino un huracán. No hay más que darse una vuelta por el rugby francés, da igual que sea el Top-14, que según ellos mismos dicen es la mejor liga del mundo, que el Top-16 y llega hasta las "federales" y casi hasta las "honneur". Clubs en bancarrota por la inercia de un endeudamiento inconsciente e irresponsable de clubs históricos (Biarritz, Narbonne, Beziers, Tarbes ...) Y eso que está la Dirección Nacional de Ayuda y de Control de Gestión (D.N.A.C.G.), que audita y somete sus informes a la federación correspondiente quien actúa en consecuencia y procede a veces a descensos administrativos (Montauban, Tarbes ...) y "nuestro" B.O. se ha librado por los pelos, y por la actitud de la familia del recientemente fallecido Serge Kampf, mecenas en los últimos años del B.O.. Anteriormente le ocurrió al "más nuestro" A.B. de la época Afflelou, al que también salvó la campana.

Y la revolución con la lista "èlite" para la selección francesa después del fracaso de los últimos diez años por jugar al resultadismo tremendista y los golpes de castigo, como en la época del apertura Jenkins en Gales, y ambas selecciones cayeron en la vulgaridad. Gales cambió de estilo (y de apertura), y ganó dos "VI Naciones", y hoy en día tiene una tres cuartos poderosa y técnica que puede competir de tú a tú con cualquiera, y para nosotros, junto con Inglaterra, son los favoritos para el VI del 17. Pero Francia ya está atravesando su Travesía del Desierto guiada por Guy Noves aunque creemos que tiene para otra temporada más para llegar al cuarto puesto mundial.

Y no han tenido más remedio que adaptarse a la situación. La situación pedía a gritos desde hace años un acuerdo entre la Liga Nacional de Rugby (L.N.R.), y la Federación Francesa de Rugby (F.F.R.). Se han rascado los dos el bolsillo, y el seleccionador tendrá a su disposición a los jugadores de la lista "èlite", al menos 120 días al año, frente a los 80 anteriores. Esto exige una compensación económica a los clubs, ya acordada, y se acerca a lo que viene haciendo Nueva Zelanda desde hace muchos años, y Gales recientemente. Prioridad a su selección, frente a los compromisos de los clubs.

Hay muchas más novedades, pero conviene que nuestras autoridades federativas, políticas del deporte, directivos de los clubs, árbitros y hasta los jugadores, se informen para saber a lo que están jugando, que estos acontecimientos obligan a innovar para subsistir. Y ahí nos toca a nosotros. Al rugby de Gipuzkoa, por no extendernos a las provincias cercanas de Hego é Iparralde que es nuestra zona de influencia y en nuestra opinión, la clave de nuestro desarrollo. No podemos esperar a lo que haga el rugby español, que técnicamente nos ha sobrepasado, pues tiene un lastre muy pesado para su desarrollo. Nosotros tenemos a nuestro alcance por tradición deportiva y por desarrollo económico, la posibilidad de tener competiciones cercanas, con desplazamientos cortos y posibilidad de asistencia de visitantes y locales a los partidos, haciendo agradable el espectáculo deportivo y la estancia en nuestra localidad para que valores proclamados como la fraternidad no sean una expresión trasnochada. Y tenemos que innovar en técnicas de captación de publicidad, en relaciones públicas, en atenciones con los medios poniendo a su disposición instalaciones técnicas para el desempeño de sus funciones, crear un ambiente en el campo antes de los partidos (música, etc.), pero sobre todo, jugando para la diversión del jugador y de los espectadores. Fidelizar al espectador que ahora es ocasional, a que sea un habitual, y que en su agenda de ocio figure semanalmente el rugby, de Escola, "Under" o Senior, femenino o masculino. Y para jugar bien, fuerte y bonito, hay que entrenarse adecuadamente. Con técnicas que propendan a la continuidad del juego, al juego de pie, individual o colectivamente, no al juego de suelo, que ni es juego, ni es nada. En todo caso una contingencia indeseada, porque el contrario te ha placado, pero es que aquí en los entrenamientos se cortan las iniciativas y se desmoviliza el avance, por orden del entrenador, que dice que "hay que tirarse para que lleguen los apoyos". De llorar. Los apoyos deben llegar en los grandes espacios, que el rugby "empieza en el ala". Ya se que en el rugby no hay dogmas, pero si mecanismos y conceptos. Y ese es el rugby intelectual. Y eso se entrena. Porque no me digan ustedes que en Gipuzkoa tenemos menos nivel intelectual que en la provincia de Otago, sede de los Highlanders, por ejemplo. Tendràn más velocidad, más resistencia y hasta más fuerza, pero no hay motivo para que tengan más técnica que nosotros, y por supuesto, de intelecto, a la par. Y uno se podrá preguntar, ¿entonces porqué juegan tan bien? Porque se entrenan para eso. Hace unos años el equipo que mejor jugaba era Francia. Los más potentes del planeta eran los Springboks (S/A), y los All Blacks (N/Z). Hoy en día, desde hace unos años y hasta dentro de otros cuanto años, los del "jogo bonito" son los All Blacks. Juegan como antes lo hacía Francia. Y Francia desde hace unos años, y esperemos que cambie pronto, juegan como los Springboks, pero sin su poderío físico. Han bajado cinco puestos en la clasificación mundial. Y volvemos a Gipuzkoa. Yo digo, aquí y ahora (y muchas veces en los últimos años), que podemos jugar como el mejor, y lo demuestro con todos los "tacos" que tengo. Porque nuestros jugadores tienen suficiente capacidad para asumir las enseñanzas técnicas y los conceptos de juego que un entrenador preparado para ello puede impartirles. Luego vendrá si nuestra delantera no tiene 900 kgs. bien plantados entre los ocho, que en la touche el más alto tenga 1,85 y que los contrarios tengan una línea más rápida que la nuestra. Hay formas tácticas para minimizar o anular las virtudes del contrario, pero en última instancia, prefiero perder por cuatro contra un equipo que me enseñe, que ganar de ochenta a un equipo manifiestamente inferior. Pero esa es otra para otro articulillo. No sé si me expreso bien, pero yo lo tengo muy claro.    

Los valores del rugby, en el Seven (Rugby Siete).

En Rugby Times estamos deseando siempre elogiar las actitudes y actuaciones - no invocamos triunfos competitivos- de nuestra familia rugbística. Nos damos cuenta que, con más frecuencia de la deseada, incidimos más en los errores y podemos parecer pesimistas, pero nosotros no bailamos el agua "a los que mandan", porque aquí, poder, lo que se dice poder, en rugby no lo tiene nadie. Pero lo que sí tienen las instituciones del rugby es representatividad. Y además, en régimen de monopolio. Si te parece que puedes aportar algo, tiene que ser a través "de la federación", aunque los ayuntamientos y la DFG controlen y financien en parte las actividades. Por tanto, puesto que nosotros, el pueblo, co-financiamos el rugby, exigimos que se nos escuche y se nos informe públicamente. Por eso nos rebelamos ante la FVR. Porque nos tiene abandonados a los que nos interesamos por la situación de nuestro rugby, tanto por el conducto directo de su web, como a través de los medios que periódicamente convocan para su propaganda.

Pero como los clubs y sus jugadores están con frecuencia por encima de sus dirigentes, te encuentras con mujeres y hombres como los que componen las selecciones españolas femenina y masculina que se han clasificado para los juegos olímpicos de este año en Río de Janeiro (Brasil).
Y han roto todos los esquemas que argumentan esos dirigentes escudándose en la crisis económica, en la demografía y en la falta de apoyos, obviando que cuando optas a presidente y/o aceptas ser directivo, contraes una responsabilidad voluntaria entendiendo que tienes cosas que aportar al margen del dinero. Y si ves que la situación te supera, déjalo, ya vendrá otro, aunque se aplique la Ley de Murphy, que también puede pasar.

Pues  ahí están nuestros  Igor Genua (Hernani), Ignacio Martín Goenaga y Pablo Feijóo  Ugalde (Donostia), en la selección masculina entre los doce componentes de su selección, lo que supone un éxito para nuestra pequeña parcela, y "nuestras" Bárbara Plá (Getxo) y Amaia Erbina (Ordizia)  en la femenina demostrando que se puede competir con las mejores aprendiendo y ganando, a veces. Es cierto que lo van a tener muy difícil los chicos contra  Sudáfrica, Australia y Francia, en el grupo "B",  y contra Nueva Zelanda, Francia y Kenia en su Grupo "B", las chicas, pero ¿cuándo lo han tenido fácil tanto unos como otras, si se marcharon aburridos con la Federación Española hasta sus entrenadores? Las tres últimas "legislaturas" ó mandatos de los dos presidentes anteriores, el gallego un trepa incompetente que lo único que le importaba era salir él en la foto, que consiguió a través de su lacayismo entrar en el CSD, y el anterior al actual Alfonso Feijóo, González Cancho dejó la tesorería repleta de incumplimientos y deudas. Dentro de las limitadísimas posibilidades económicas en las que se ha visto (y se verá) Alfonso en este y próximos años por los motivos indicados, al menos ha creado un ambiente de unión en el rugby español, desconocido desde la época de Floro Noriega como presidente. Los chicos y las chicas de la selección viven en precario, con una austeridad ejemplar, pero excesiva, cuando sus oponentes disfrutan del total apoyo de sus estados. Solamente ver las condiciones en las que entrenan las francesas en Marcoussis, ya es para echar la toalla. Pero en estas circunstancias salen los valores de las personas, trasladadas al rugby, porque, no nos engañemos, mucho hablar de los valores del rugby, pero al final los depositarios de los mismos son los practicantes del rugby que dejan tiempo y dinero por entrenar y jugar para formarse y divertirse, aunque en muchos casos se conforman con lo que hay, y los clubs no les dejan ni rechistar, porque "el club está por encima de todo". Sabemos bastante de eso, pero ¿què es el club? Lo que han  hecho las personas. Un "ente abstracto" ¿puede ser más importante que una persona? Pues nuestra opinión, que de modesta no tiene nada, mantiene que el club se ha creado para estar al servicio de las personas. Y una vez más, recordamos la gesta de los componentes de las dos selecciones y a Alfonso Feijóo por su  sensibilidad y apoyo, para que sirva de estímulo a toda la familia del rugby y entre todos podamos sacar a nuestro deporte de este marasmo tancrediano. Aquí pararse a mirarse el ombligo es retroceder. Que nos sirva la lección del Seven chicas y chicos, para dejarnos de excusas y empezar a tirar del carro hacia adelante, con la colaboración de todos. Y ya sabemos que los valores no se escriben, se practican.

Y ya que estamos de jugadores ( siempre las mujeres incluidas),  para los próximos Campeonatos Mundiales Universitarios de Seven, han sido seleccionadas Nerea Aguirre (Getxo) y Enara Cacho (Hernani), y para el masculino, Javier Martín Goenaga (Bera Bera). Se celebran en Swansea (Gales), los próximos 7 al 9 de Julio.  Nuestra felicitación a los tres, que se diviertan y que tengan suerte.
Otro par de acontecimientos positivos para el rugby, en este caso el XV. Llenazo en el José Zorrilla, de Valladolid, en la final del campeonato entre los dos equipos locales, el VRAC y El Salvador, que convocar a más de 25 mil espectadores en un partido de rugby entre equipos españoles, es para hacernos meditar un poco a todos. ¿Se puede, o no se puede? Parece que sí. ¿De qué depende? Nosotros pensamos en la "experiencia Dixon", de Ordizia, como el punto de partida del despegue del rugby en Hegoalde. Gestión realista y adecuada a la situación social, económica y deportiva, y a partir de ahí, instituciones y empresas (ingresos atípicos) No olvidar un análisis científico y un pragmatismo empresarial, todo ello envuelto en un halo ético. Esos también son valores del rugby. Que lo es bueno en el rugby, sea bueno para la sociedad. Los valores, a la calle, a compartirlos. El jugador de rugby tiene que serlo dentro y fuera del campo, y su comportamiento, una marca social.
Y el otro, un poco más lejano y utópico, pero interesante como fenómeno social, los 98.000 espectadores en el Camp Nou, de Barcelona, en la final del Top-14 francés, entre el Racing Metro, de Paris, y el Toulon, de la misma villa mediterránea. Un desplazamiento sin ningún incidente, en contraste con el festival de violencia de la Eurocopa francesa en fútbol. Esto es para hacer reflexionar a las instituciones políticas, apoyando o permitiendo (para luego reprimir), los comportamientos habituales en los campos de fútbol y en las ciudades más futboleras con el apoyo de las más altas autoridades de la nación a un comportamiento antisocial. Así nos va.