Tranquilidad, no. Serenidad, sí.

Los dos principales clubs de nuestra provincia, pasan por momentos delicados, aunque con situaciones diferentes. Nos referimos, como ya sabran, a Ordizia y Hernani. Ordizia busca su identidad competitiva en la Honor "A", con un reciente historial de éxitos clasificatorios y dos trofeos de Campeón de Copa, con los que ha dejado el listón muy alto, y muchos esperan superarlo. Pero los buenos aficionados "highlanders" saben que con viento de popa se puede preparar el futuro de la entidad de forma que cuando salgan al campo, sean reconocidos año tras año como gente de casa, y no tener siete jugadores extranjeros en el campo, y deambular sin identidad por el mismo. Dejando al margen el coste de los fichajes foráneos, que no es baladí, vamos a ver lo que pasa por ahí, a ver si podemos aprender algo.

Ya hemos tratado la situación de los clubs en función de sus economías, y la gestión deportiva que han hecho las directivas que han hecho en tiempos de bonanza económica, clubs como Canoe-CRC, Alcobendas, El Salvador (1), Gernika, y un poco Ciencias, de Sevilla, que en cuanto la Junta ha bajado el nivel de ayudas económicas al deporte, y Cajasol se ha fusionado y no tiene la misma autonomía patrocinadora, ha caído el Ciencias, como antes el Universitario, ambos de Sevilla. Pero El Salvador ha salido adelante con los chavales de la cantera, y así lo escribimos hace tres temporadas, cuando hubo una desbandada general  no tanto por falta de pasta, sino por la enorme deuda que había generado la directiva "chamiza" de más de seiscientos mil euros, que para nuestro casi indigente rugby, es un pastón.

Solo quedó Joe Mamea, el tercera neozelandés, que sigue dando lecciones. Con el paso esporádico de Sempere, y la vuelta de Dani Marrón, ahí andan, con Carter, Gorosito, Sale Ibarra y cía., en la cabeza de la clasificación. En cuanto se ha dado una oportunidad a su extraordinaria cantera, han dado la talla. Y Ciencias volverá pronto, refundado, a la primera línea. Porque tiene muy buena cantera. Pero para los chavales den la talla, hace falta paciencia y tacto. Hay cosas que no se pueden comprar ni entrenar. La experiencia. Porque nace de la reflexión de cada jugador analizando lo que hace, lo que siente y lo que ha visto en los campos en los que ha jugado. Porque sin jugar con exigencia enfrente, ni se divierte ni se aprende. Y Ordizia está en esta fase. Y los directivos confían en Santos Régil como primer entrenador. No es Axio Araña. Es totalmente diferente. Más técnico. Menos motivador. Pero tiene base sólida. También el entrenador necesita confianza. De todas formas, con serenidad, hay que plantearse las renovaciones para la temporada que viene en la plantilla de neoprofesionales. Algunos han dado lo que tenían, y están cerrando el paso a chavales de casa sin marcar grandes diferencias, en los puestos clave que se pueden cubrir con los de casa. Los de técnica, velocidad, visión y juego de pié, como corresponde al back, y los medios, tanto de melée como de apertura. Siempre dependemos de un pateador extranjero. No jodamos, que este es un país de futboleros y podemos golpear el balón con el pié, igual o mejor que un neozelandés, pongamos por caso. ¿Es que no hay un entrenador de juego de pié? Pues se busca. No andan tan lejos. Rugby Times ya apuntó un nombre hace un año, para que lo contratase la federación autonómica para el servicio de los clubs de la provincia. Desde que se fué Julen Goia, no ha metido un drop ninguno de casa, y creo que los de fuera, un par de ellos. Juego a las alas, olvidado. Romper una defensa por debajo, debe ser etrusco. En una competición que hay huecos por todas las partes donde se mire. Los jugadores, con la excepción de media docena en toda la liga, no ocupan espacios, y hay golpeos de balón que aunque los intuyas no tienes nada que hacer para defenderlos. Setenta minutos dándonos de leches gratuitamente sin que nos lo exija el contrario, y al final todos con la boca abierta porque un jugador inteligente y hábil, ha colocado el balón enfrente de palos o en el banderín de corner, y un compañero rápido y listo, lo ha cogido cerca o dentro de la línea de marca. No sigo, porque el rugby gipuzkoano, o no se entera, o no lo entiende. Pero bueno, siempre podremos hacer una encuesta sobre los valores del rugby. ¡Lo que hay que ver!

Hernani lo tiene peor. Bueno, depende como se mire. Sigue una filosofía, lo tiene claro y actúa en consecuencia. Cuando se escriba la historia de nuestro rugby, con toda seguridad Hernani estará a la cabeza del rugby gipuzkoano en los sesenta u ochenta años de historia.  Porque saben que este año lo tienen jodido en Honor "A", ya que el que mas a mano tienen es el Barcelona, y está moviéndose mejor que Hernani en casi todos los partidos. De Vigo, olvidarse. Ha vuelto Maxwell como adjunto a entrenador, y motivador de vestuario, y tiene capacidad de convocatoria en Galicia y .....en NZ. Getxo y Gernika se van despegando poco a poco, y el CRC se crece después de Navidad. Tanto estos como el Barsa, son más rápidos y técnicos que nosotros manejando el balón en los grandes espacios, desde hace muchos años, y los campos secos de Febrero-Abril les favorecen. No vamos a recomendar a los jugadores de Hernani que sigan peleando y disfruten, porque eso está en su ADN, pero sí que en rugby y en otros deportes, pasan cosas mucho más raras y podría jugar el play off sin descenso directo. El problema es que a estas alturas de la competición, dependen de los demás, y no entra en sus principios (que elogiamos), traer en Enero a cuatro vacas sagradas al cuartel de invierno para que le resuelvan el problema deportivo, y les provoquen un problema económico. Mañana estaremos en Landare contra el Bathco, y observaremos su actitud y la forma de jugar. El resultado es otra cosa. Si miramos la plantilla de los santanderinos, han ganado sin bajarse del autobús. Pero el año pasado también vinieron sobraditos y con desfile militar a la salida al campo. ¡Qué fantasmada! Y luego palmaron. En todos los casos, confiamos en los de Hernani. Aunque llevamos años reclamando otra forma de jugar, porque lo saben hacer. Pero ese es otro tema.Aupa Hernani.

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