Temporada 08/09.

No ha terminado todavía, de acuerdo. Faltan los incombustibles equipos de Ordizia. El segundo equipo senior que juega su fase de ascenso DB y a punto de conseguirla, y el bravo equipo juvenil clasificado para la fase final del Cº de España.. Pero todavía está la gente del rugby movilizada, y convendría plantearse la próxima temporada en estos momentos, antes de que jugadores, técnicos y directivos entren en la temporada de abandono, incertidumbre y típica desbandada del rugby en busca de otras emociones deportivas más clarificadas y menos exigentes.
Es tiempo de ese tipo de personas que gobiernan los presupuestos, que deciden las formas y las compensaciones de todo tipo incluso discriminaciones y agravios comparativos entre los distintos jugadores. Es su tiempo de reflexión y análisis, si no lo han hecho ya. Y de rectificar los procedimientos para mejorar o al menos para .intentarlo. Todo, menos persistir en el error por el prurito de que la culpa es de los demás. En estos momentos es mejor pecar de modestos que de arrogantes. Por el bien de la institución, por el bien del rugby. Y si hay que dejarlo, se deja. Que nadie es indispensable, aunque algunos lo piensan de si mismos.
Estos comentarios no salen en prensa. Solo publican las rutinas . No analizan. No les interesa censurar el trabajo de los que mandan, aunque sea mal. Son dulzones. Pero R-T ha sido y será amigo del rugby y de las personas que se mueven, juegan y deciden dentro del mismo. Pero lo mejor que puede hacer un amigo es decirle las verdades, sus verdades a sus amigos, con el ánimo de que no persistan en el error. El silencio en estos casos es una cobardía. O desinterés. No es nuestro caso, y entramos a fondo en nuestro análisis.

El mejor Club gipuzkoano ha sido de largo, Ordizia. Lo dijimos en un trabajo anterior. Por una vez en Gipuzkoa se ha invertido bien. No se ha fundido el poco dinero que manejan los clubs. Se ha acertado de pleno en el fichaje de un Maisu del rugby. Y los jugadores lo han notado. Y ahí están, siendo el orgullo del deporte ordiziarra y del rugby gipuzkoano. Y no lleva más que una temporada. Parece que tiene al menos otra más. Aupa!.
Pero el rugby en Ordizia tiene un problema para el futuro. Es más, un gran problema que puede condicionar su desarrollo. Y no es un fallo de gestión. Es que se quedan sin nuestro querido campo de Trevijano. En Altamira no será igual.. En ningún aspecto. Ni por la cercanía y el ánimo de la afición, ni por la ubicación, parking y acceso, ni por el juego. Y esto si que es importante. Porque entrenar y jugar en superficie artificial va a condicionar los resultados fuera de casa, cuando se juega sobre césped natural. El balón no sale igual, y parece que se juega a un deporte diferente. No hay más que ir a Durango. Y la superficie de Altamira es mucho peor. Y en nuestra opinión no está en condiciones para jugar al rugby. Desprende infinidad de bolitas de plástico inorgánico sólo con dejar caer el balón desde la cintura al suelo. Y esos fragmentos pueden entrar en el organismo del jugador, o integrarse en una herida abierta en una rodilla, por ejemplo. Y sería interesante analizar el grado de toxicidad, para evitar responsabilidades al club o al titular de la instalación.
Y proclamamos que no queremos ser alarmistas. Pero ese campo es una chapuza. Y las partículas que hemos comprobado que se desprenden son un peligro para la salud de los jugadores. Sin entrar en el condicionante técnico de la superficie para la práctica del rugby. Alguien se ha equivocado al recepcionar esa instalación y no creemos que haya sido Ordizia R.E.. Aunque van a ser los perjudicados.
No se puede cerrar el comentario respecto a ORE sin mencionar concretamente a los jugadores Cadetes, Juveniles y sus técnicos, por la brillante temporada realizada hasta la fecha, porque el Juvenil todavía tiene muchas posibilidades de ser Campeón de España. Once de sus integrantes pasan a senior la próxima temporada, y aquí está el exámen del sistema. A ver cómo tratan los técnicos y directivos esta situación. De momento parece que han decidido ascender al primer equipo al menos cuatro jugadores. Nos parece un gran error. El segundo equipo senior tiene pie y medio en la llamada pomposamente primera división, y tiene una ocasión de oro para, con lo que tiene hoy (potencia) y lo que aportan los chavales (ritmo), hacer de una pajolera vez un gran segundo equipo, que resuelva problemas al primero cuando le haga falta. No se equivoquen. Si no tienen un muy buen equipo jugando en División de Honor B, que debería ser el objetivo para la 10/ll, van a estar toda la vida tirando de talonario y cambiando de plantilla cada año. Sin consolidarse nunca. Por tanto, el objetivo del segundo equipo para la próxima temporada debe ser el ascenso a División Honor “B”. Sin complejos.
El primer año senior de un jugador, por mucho que haya destacado en juveniles, es para hacerse físicamente jugando y percutiendo con organismos consolidados mucho más fuertes que él. Que el peso de las operaciones de juego corto lo lleven los veteranos, que se traguen los marrones del suelo, y que los juveniles jueguen balones limpios, y así y todo van a comprobar la diferencia en los contactos. En las melees no debe haber simultáneamente más de dos o como mucho tres chavales. La presión de una melee disputada para un esqueleto no consolidado y una anatomía sin muscular de forma natural (no los “machaquen “ con las pesas que son peligrosas, siempre, pero más en esa edad) puede resultar excesiva y poner a trabajar partes del organismo delicados que luego pasan factura.
En cambio en touche tienen todas las posibilidades. Es una jugada más vigilada. Por cierto, pasan un par de chavales con un futuro impresionante en esta jugada.
Y para completar nuestra opinión sobre la transición de juvenil a senior, si el Primer Entrenador necesita para la próxima temporada de algún ex juvenil, que lo reclame puntualmente para un partido, pero que permita entrenar y jugar el máximo tiempo con el segundo equipo al menos la primera temporada, y si pueden ser dos mejor. Que los desarrollos físicos prolongados, de músculo largo, son con mucho los que mejores rendimientos aportan y los que menos se lesionan. Pero no hay que romperlos con las prisas.

Probablemente habrá muchas discrepancias sobre nuestro análisis, que por cierto, sirve para todos los equipos, pero si discrepan, que concreten, que diseccionen el proceso físico más que técnico. No vale comparar situaciones con el juego de hace diez o quince años. A pesar de lo que dicen, se ha endurecido mucho. Antes estabas preparado para recibir un viaje que casi lo veías venir, pero ahora te juegas las cervicales en cada “ruck”, que es mucho más delicado. Otra más. La demanda de delanteros. No hay. Y hablando del “pack” (primera y segunda línea), tienen problemas hasta en Australia, que con Sudáfrica han sido los mejores en este tipo de jugadores. Una de las muchas asignaturas pendientes en nuestro rugby gipuzkoano es la transición de juvenil a senior. Es indispensable un debate para aclarar ideas y conceptos. Y de paso culturizarse en anatomía y fisiología humanas, en unas líneas generales. Que nos sirva para no meter la pata como lo de las pesas. Que sin estar prohibidas, hay otros sistemas que no se utilizan y que ¡casualidad¡ han recuperado los que en teoría más saben de esto. O uno de los que más. Nueva Zelanda. Y eso sí que podemos copiarlo todos, porque son sistemas asimilables, anatomías y físicos aparte.
Podía ser una bonita intervención de la Federación Gipuzkoana de Rugby. Aupa Lasku.

En próximas intervenciones analizaremos los comportamientos durante la temporada 08/09 de los restantes equipos de la provincia y las perspectivas y expectativas para la próxima temporada 09/10 que coincide con el Cincuentenario del rugby en Gipuzkoa, que lógicamente tendrá un amplio seguimiento desde Rugby Times.