Al final del último comentario deslizábamos la pregunta dirigida a Ordizia R.E., “¿para cuándo una Subsede en Tolosa?”. Este planteamiento no se lo podemos hacer a ningún otro club de rugby gipuzkoano, porque no han abordado y resuelto las etapas previas que ORE ha superado, para plantearse una política de expansión, como es la consolidación institucional (apoyo, instalaciones, ayudas económicas y materiales …), capacidad de convocatoria de miles de aficionados en los encuentros del primer equipo en competición, esforzarse y conseguir que los espectadores asistentes tengan una cultura deportiva en rugby, que los principios éticos y sociales se inculquen desde la Rugby Eskola, que hayan sido capaces de crear un tejido de apoyo económico en la industria y comercio privados con un alto nivel de fidelización en tiempos delicados para estos apoyos, que hayan ido al mercado de neo profesionales a fichar y se hayan equivocado y por tanto, aprendido para fichar bien, que también lo han hecho, que hayan creído en el segundo equipo como la auténtica reserva y garantía de futuro del primer equipo, y que hayan recibido un par de decepciones de las que duelen por injustas y extemporáneas, y que enseñan a no presentar vírgenes a dioses paganos. O sea, que han alcanzado un grado de madurez que solo se consigue arriesgando con un plan “B”, y sacando consecuencias de lo positivo y lo negativo. Por eso nos atrevemos a sugerirles una nueva etapa en su desarrollo. Una Subsede en Tolosa. Empezaron a jugar antes que en Ordizia. Tenían un bonito equipo en la Escuela Técnica de Papeleros, y un campo magnífico. Berazubi. Y otra cosa. La mejor tradición deportiva de toda la provincia, con la excepción de Donostia.
Naturalmente, el primer paso sería contactar (nosotros lo haríamos acompañados de Iñaki Laskurain, Presidente de la Autonómica, por motivos que expondremos) con el Tolosa, C.F y plantearles una línea de colaboración entre ambas entidades extraoficialmente como representantes de Goiherri y Tolosaldea en el campo del deporte. Esto a la D.F. de Gipuzkoa le suena a música celestial, y estamos seguros que apoyaría con los medios que acostumbra cuando una cosa tiene generosidad y contenido social. Si desde la UE se han priorizado siempre los proyectos “Copartnner” y las transcomarcas (Euskadi-Aquitania …), que Gipuzkoa aparque su rico y creativo individualismo por una vez, y sin renunciar a ninguna identidad, unir intereses. Porque a nosotros no se nos ocurriría ir a Tolosa para nuestro exclusivo beneficio, sino con un planteamiento digno, novedoso, audaz y mutuamente beneficioso. Hay que echarle algo de imaginación, pero no mucha. Pero las consecuencias de esa unión podrían ser definitivas para abordar el futuro de ORE. Jugar algunos partidos de competición en Berazubi. Los buenos aficionados lo comprenderán, y la cantera de rugby se ampliará. Habrá espectadores de Tolosa que se engancharán y se desplazarán a Altamira. La afición actual de Ordizia es un filón. Hablando en plata, son acojonantes. Hemos tenido la suerte de estar con ellos muchas veces, pero además, en Palencia, Valladolid y Santander, donde se ha perdido y se ha ganado, y nunca han perdido las formas. Todavía nos acordamos los diecisiete puntos del VRAC en el primer tiempo de El Sardinero, y cómo la afición levantó al equipo cantando y animando como no hemos visto en ningún campo español en más de cincuenta años de rugby. Ordizia tiene al lado a Beasain y su “hinterland” (Olaberría, Idiazábal, etc.), pero creemos que esa zona está bien “trabajada”, pero Tolosaldea merece la pena. Hemos vivido en Tolosa, y damos fe. Solo pedimos a la Directiva ORE que se lo plantee. Si no creyésemos que es positiva para ellos, no se nos ocurriría plantearlo. Como no lo hacemos con Hernani R.E. porque todavía no ha hecho el recorrido que si ha hecho Ordizia (no tiene que ser mimético), le plantearíamos la zona de Lasarte Oria, Andoain, Urnieta, Astigasrraga y Martutene., y hasta el barrio de Egia en Donostia. Todavía nos acordamos que durante los mejores años del Hernani (entonces Rugby Club), que entrenaba el extraordinario Iñaki Quesada, la primera línea del primer equipo era completa de Egia. Pero antes tiene que definir objetivos y establecer prioridades diseñando una verdadera Hoja de Ruta. Y diríamos lo mismo de Irún con el caudal demográfico hasta Rentería. Y Donostia, que tiene el chollazo del Campus Universitario abandonado. Y la extraordinaria tradición deportiva y pionera de Zarautz, Eibar, Arrasate … Pero esas entidades no están para dar saltos aventureros. Ordizia si. Y repetimos un comentario anterior. Se puede ser el mejor y no ser leader (líder). Animo chavales. Imaginación y audacia no cuestan dinero. Ahí no hay crisis.
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