Rutina, interés o ilusión

Hacemos un esfuerzo, y nos apuntamos a la ilusión 13/l4, pero vamos a intentar apoyarnos en datos o expectativas que lo justifiquen, porque nos damos cuenta que, con más frecuencia de la que desearíamos, Rugby Times presenta un panorama con muy pocos motivos para el optimismo, y solo nos mantiene la esperanza en las personas que en estos momentos gestionan nuestro rugby, y sobre todo, en las que se pudiesen incorporar a nivel directivo de clubs y federaciones, ya que lo de los técnicos lo vemos más problemático debido a la rigidez del sistema . Porque personas capacitadas, hay, pero algunos se han preocupado de reglamentarlo para la eternización de una casta. Nuestros primeros equipos están explorando hasta el subsuelo buscando jugadores adecuados y económicamente asequibles, pero por aquí no hay mucho que rascar, aparte de que de lo poquito que hay, si se ficha, aumentamos el desequilibrio en el rugby gipuzkoano, y si hay que fichar fuera, el desequilibrio es para las tesorerías, que redunda en las categorías llamadas inferiores, y a sangrar a los jugadores y a sus familias, pero no están los tiempos para dispendios. Pues vamos a lo práctico. Ordizia a mantener su prestigio, y si cae algo, de cine. Pero los aficionados entenderán que es un tiempo de transición, y en estas circunstancias, resistir es vencer. El trabajo “por abajo” ha sido muy bueno, y es hora de recoger la cosecha. Y para completarlo, hay que dar minutos y horas de juego a los chavales, sin agobiarles con clasificaciones y títulos. Hernani parece que lo tiene peor, entre otras cosas, porque no ha hecho bien la transición de juveniles a senior, en los últimos años, y el segundo equipo senior es el reflejo de ello. Ahora necesita seis o siete jugadores combativos y de aguante, aparte del anunciado fichaje de Insausti, ¿de dónde los saca?. No los tiene. ¿La l3/l4?. Pelear con todo desde el principio de la temporada cuando algunos equipos todavía no están conjuntados, y hacer de hormiguitas para la segunda vuelta. Descolgar a otro equipo, además del Independiente, y aguantar otra temporada a ver si escampa. Vigo, Getxo y Cajasol, están un punto por encima, y no creemos que Gernika caiga tan bajo. La inercia de la media temporada pasada no se olvida de la noche a la mañana, aunque pensamos que quedará por debajo del Getxo. Eibar, Bera Bera y Zarautz, si se mantienen los tres, un triunfo. Que la División Honor “B” no es muy buena, pero si muy rara. Y los de lareestructurada llamada pomposamente Primera División, aparte del Atlético que nos puede deparar lo peor, la magnífica oportunidad para Ordizia “B” que ahora si puede ascender, está el Irún, R.C., que cualquier año nos dará una gran alegría. Tenemos una gran confianza en este equipo, y el día que se decidan (y estén en situación) a dar el salto, cambiará mucho y a mejor el rugby gipuzkoano. Por varios motivos, aparte de su situación geográfica. Perdida por un tiempo la “capi” Donostia, y consolidados los Highlanders de Ordizia (¿para cuándo una subsede en Tolosa jugando algunos partidos en Berazubi?), la esperanza está en Irún. Solo falta que se despierten y se lo crean. La próxima, los Sub 20 para abajo. Ondo izan.