En este capítulo de análisis le llega el turno al Club Atlético San Sebastián, esperanza y decepción del rugby gipuzkoano. Lo tiene casi todo para liderar nuestro rugby. Infraestructura (es el único club con campo propio), tiene una masa social de más de tres mil socios, tiene el mejor historial del rugby estatal, pero no tiene voluntad de apoyo a la Sección.
Lleva veinte años aplicando una política errática, poniendo la sección de rugby en manos de tècnicos (con la excepción de Alfonso Feijóo, hombre clave para la recuperación) que no conoce la idiosincrasia de la gente de Donostialdea, que va a solucionar sus problemas particulares y que no sienten nuestro rugby para nada.
Cuando no es un núcleo argentino, es uno francés, y decimos francés, no de Iparralde, y sabemos lo que decimos a este respecto. Y la gente de casa, siempre marginada. Nuestra juventud podrá tener defectos, pero de tontos no tienen nada. Por generosidad pueden aguantar un año los agravios comparativos de la temporada, pero lógicamente al poco tiempo buscan y encuentran - porque la oferta de ocio, tiempo libre o deportiva es muy amplia y atractiva en Gipuzkoa, pero quizá más en Donostia - otra aplicación para su tiempo libre.
Otros equipos tienen otros problemas, pero casi todos, por no decir todos, tratan mejor a sus jugadores, a los locales, y lógicamente tienen estabilidad en su plantilla. Y no tienen los problemas que ha tenido este año el Atlétiko (es la marca del Club), como son, por ejemplo, la desaparición a media temporada del segundo equipo y del juvenil y en ninguno de los casos por falta de jugadores. Y esto se mire por donde se mire, es un fracaso. Mayor que el del llamado primer equipo que bajó de categoría, lo que no es más que un síntoma o consecuencia de la errática marcha en la dirección de la sección.
Por justicia hay que destacar el comportamiento humano y deportivo del Cadete. No sólo ha reunido el club un equipo bonito, con buen rugby, sino que además el comportamiento en el terreno de juego y fuera de él, ha sido ejemplar. Y otra cosa, igual no tiene el Atlétiko en su sección de rugby, pero educación y formas, las mejores.
Y eso también se nota en el Infantil que dirige desde hace un montón de años Félix Alvear. Este si que es un “crack”. Si hay un monumento o una distinción en el club, es para Félix. Muchas de las cosas buenas que se encuentran más arriba (Cadetes y Juveniles), han sido modeladas por él. Bueno, para ser justos, por la Escuela y por Félix.
Y otro núcleo en el que el rugby gana todos los años, es la Escuela Mixta de Rugby del Club Atlético San Sebastián. Así, con todos los títulos y letras. Es un filón social y el club sin enterarse. Los Educadores por encima de todo son excelentes personas con una calidad personal, nivel intelectual, generosidad social y formación humanística inusuales. Y eso se nota en los comportamientos de los chavales en el campo de juegos (porque van a jugar ), en el vestuario y en la calle. Y no son elogios gratuitos, que conocemos otros lares donde no se hila tan fino y se prima la competitividad sobre la educación y el JUEGO.
Sabemos por experiencia que los que mandan (dirigir es otra cosa) en el rugby del Atlétiko no son proclives a aceptar consejos de nadie, pues están por encima del bien y del mal, pero por si cambian (a mejor), vamos a dirigirles unas propuestas con la mejor voluntad y nuestro mejor deseo.
Una reflexión inmediata y profunda del proyecto del rugby en el Club, con asistencia de sensibilidades diferentes y a poder ser con ausencia de empleados. Por el Atlétiko han pasado personas de prestigio social y solvencia profesional que podrían hacer aportaciones desde la Sociedad y los Estamentos, que a los técnicos y directivos probablemente ni se les ocurrirían. Y con presencia de una representación elegida de los jugadores y técnicos. Involucrar a la Federación Gipuzkoana de Rugby como asesora, etc.etc…
Vamos, una refundación, o en el peor de los casos una definición, pero dejar las cosas claras.
A nadie se le oculta que la reserva financiera mas realizable para el Club es el campo de rugby y los terrenos anexos. La calificación urbanística que tienen y su envidiable situación, hacen de la zona una invitación a la inversión en instalaciones deportivas profesionalizadas. Eso lo sabe toda la masa social, y por extensión, medio Donostia.
Bien, eso está ahí, y ha aguantado el primer intento de compra. Pero mientras no se modifique su titularidad, y refiriéndonos ahora exclusivamente a los terrenos anexos al campo de rugby, se podrían nivelar, hacer una limpieza y habilitar con una inversión económica mínima y posiblemente autofinanciada con un Parque de Publicidad o un patrocinio individual. Para entrenar o incluso jugar partidos de Escuela, Infantiles, Cadetes y Veteranos. Y si nos apuran un poco y aciertan los directivos en la gestión económica de la zona, hasta hacer un campo de rugby reglamentario para sustituir al actual que presenta muchos inconvenientes de todo tipo y se podría dejar como auxiliar. La situación y proyección del Club en el rugby cambiaría totalmente. Porque una vez introducidos en las formas empresariales de gestión, sería más fácil instalar una grada ligera, no sujeta a un plan urbanístico, ampliar los vestuarios, etc….y extraer un rendimiento económico, social, y deportivo de la actuación en la zona que hoy es un vertedero .y que con una mínima inversión económica podría convertirse en un paseo pedagógico de la naturaleza pionero en Donostia y precioso complemento de la riqueza naturalística de Aiete, todo ello, alrededor del campo de rugby.. Creemos que se desconoce el gran potencial de la zona..
Los primeros agradecidos, los jugadores, los siguientes, los vecinos, que verían su entorno dignificado, y el tercero el club, que ve como se revalorizan sus terrenos.. Y la imagen, señores directivos, que está muy deteriorada en el barrio. Son varias las movilizaciones que se han organizado contra el Club. Y eso va en contra de la concesión de Club de Interés Social por parte de Euzko Jaurlaritza.
También plantearse de una vez, seriamente el rugby femenino. No puede sobrevivir año tras año en la penuria económico-deportiva mantenido casi exclusivamente en la casta y generosidad de las mujeres que componen el grupo, por cierto, con un comportamiento siempre ejemplar.
Si van a hacer algo positivo, que se note desde fuera. Mejores entrenadores. Mejores horarios de partidos. Más publicidad. Cuidar los equipamientos adecuándolos, que aquí no vale el “café para todos”. Aumentar en lo posible la asignación económica al grupo. Hacer una labor de captación económicamente compensada en centros de educación, Universidad, etc.etc. ¡Ah! Y un poquito de cariño y a ver si asistís algunos directivos de vez en cuando a los partidos, que se agradece cuando estas en familia..
Y si no, decirles: Buscaros la vida. Aquí no se van a mejorar las condiciones, porque eso cuesta dinero.
Haríamos más propuestas, pero no es nuestro desea agobiar. Además, si vosotros ya sabéis lo que le hace falta al rugby del Atlétiko. Ahora se trata de que sepáis lo que le sobra.
Un cordial saludo sincero.
Mercado Verano 2015/16
Hace 11 años
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